Sería interesante ver un documental de como Lorenzo Vigas pasó de la biología molecular a ganar el León de Oro en Venecia por su opera prima Desde Allá. En 2015 Vigas hizo historia por partida doble, primero se convirtió en el primer Venezolano en ser invitado a la competencia oficial del festival de cine de Venecia y en segundo lugar obteniendo el preciado León de Oro. Era cuestión de tiempo para que las luces grandes comenzaran a apuntar en dirección al «veterano debutante». Tal vez esa sea la mejor forma de describir a este señor de 49 años que luego de obtener un grado en biología molecular decidió estudiar cine y pasó gran parte de su vida haciendo trabajos para televisión en su natal Venezuela y luego en México donde realizó el multi-premiado cortometraje «Los Elefantes Nunca Olvidan».
Si bien «Desde Allá» se inscribe como el primer largometraje de este director Venezolano, su trabajo en la industria paga dividendos muy altos. La seguridad que transmite el trabajo como director de Vigas está lejos de los titubeos o inseguridades de los directores menos experimentados. No sólo demuestra tener un perfecto manejo de los elementos del lenguaje cinematográfico sino que también se toma sus riesgos con una puesta en escena desafiante e impactante. Partiendo desde el tema que aborda este filme ya cualquier director tendría un buen bocado nada fácil de masticar. Un hombre entrado en sus 50 que se pasea por las calles de Caracas en busca de mozalbetes que le sirvan de compañía sexual y hasta aquí para no alargarme con detalles de la historia. El tema es crudo y la forma como se aborda es desgarradora y nos obliga a confrontar dilemas morales desde los más básicos hasta los más complejos.
El director necesitaba para esta historia dos elementos claves, un actor veterano que pudiera encarar el complejo personaje de Armando y un actor novel que pudiera transmitir una presencia fuerte pero que a la vez dejara ver cierta ingenuidad para el rol de Elder. Así Armando y Elder se convierten en el combustible que hace que toda esta máquina se ponga en marcha. El chileno Alfredo Castro (un favorito de Pablo Larraín) con quien nos hemos deleitado en películas como: Tony Manero, Post Mortem, NO. Es el responsable de abordar a ese Armando y su trabajo es simplemente fabuloso. De su lado el debutante Luis Silva se compromete con el personaje de Elder y su fuerza en pantalla nos conmueve.
En el guión Vigas recibió la colaboración de un experto en estos menesteres, el mexicano Guillermo Arriaga (Amores
Perros, 21 Gramos, Babel). El resulta es sin dudas una de las partes más fuertes de «Desde Allá», la construcción de la historia y el desarrollo de los personajes es impecable. La forma como se plantea este drama intenso deja al espectador tan aturdido como los mismos personajes de la historia. Para poner en imágenes su relato el director se apoya en otro bastante avezado en la materia de cine, Sergio Armstrong. La labor de cinematografía le corresponde a Armstrong que en su currículum tiene obras como: Tony Manero, Nana, No y El Club. Aquí su cámara se asocia con una variedad de primeros planos que enriquecen la narrativa de la historia y que ayudan a que conectemos con las emociones de los personajes, de igual manera el uso del fuera de foco y en muchos momentos la cámara objetiva sobre el personaje de Armando.
Lorenzo Vigas inscribe su nombre en una lista privilegiada de directores que han salido por la puerta grande con su primer trabajo de largometraje y sin reparos podemos recomendar esta «Desde Allá».
9/10
Ficha Técnica:
- Direción: Lorenzo Vigas.
- Guión: Lorenzo Vigas, Guillermo Arriaga.
- Reparto: Alfredo Castro, Luis Silva, Jericó Montilla.
- Género: Drama.
- País: Venezuela.
- Duración: 93 min.
HPS
