El filme The Kitchen de la directora Andrea Berloff es un buen ejemplo de que no se puede estar con Dios y con el diablo al mismo tiempo. Adaptando el cómic homónimo de la casa DC, Berloff crea su guión para meternos en el Nueva York de los 70 y el submundo de los gánsteres y las mafias. En su discurso la directora propone una historia de crimen con dosis de acción pero en su narrativa la esencia se diluye. No hay una decisión clara entre hacer una película de acción o una comedia oscura, nos quedamos en un limbo.
Berloff viene del mundo de la escritura. En 2015 se destacó por su trabajo como guionista en la aclamada “Straight Outta Compton” sobre los orígenes del grupo norteamericano de Hip-Hop N.W.A. en ese momento estuvo nominada junto con otros colegas a mejor guión original en los premios de la academia. Antes de eso estuvo junto a Oliver Stone en la malograda “World Trade Center”. Pues ahora se estrena en la silla del director con The Kitchen.
Gánsteres en tiempos del Me Too
Una vez más el cine nos lleva al Nueva York de los 70 y a sus mafias, ahora le toca a los irlandeses. Tres miembros claves del bajo mundo terminan en prisión y sus desamparadas esposas deciden tomar el toro por los cuernos y comenzar a dirigir los negocios de sus maridos. Kathy (Melissa McCarthy), Ruby (Tiffany Haddish) y Claire (elisabeth Moss) recorren las calles de Hell’s Kitchen y se apoderan de lo que sus esposos habían comenzado. Pronto tendrán que ensuciarse las manos y las cosas comienzan a complicarse.
Tiffany Haddish, Elisabeth Moss y Melissa McCarthy (Google Images)
Solo era cuestión de tiempo para que nos llegara algo como The Kitchen. En tiempos del Me Too una historia como la de Ollie Masters gritaba para que fuera adaptada al cine. El cómic de 8 números tuvo su primera impresión en 2015 y en el mismo se reescribe, en cierto modo, el género de las familias de la mafia. Se resta protagonismo a las figuras masculinas y se empoderan a los personajes femeninos para tomar el centro del escenario. La idea se antoja interesante y hasta refrescante, no sabemos de la historieta pero su adaptación al cine es fallida.
Es difícil conectar con los personajes, primero porque el desarrollo de sus arcos dramáticos es inconsistente y segundo porque no resultan nada verosímil sus acciones. El desarrollo de los personajes es deficiente y la historia avanza tropezones de una situación a la otra sin atender mucho a la lógica. Berloff por momentos nos quiere mostrar la crueldad del mundo criminal pero su discurso se corta con alguna acción cómica, insertada en el momento incorrecto.
The Kitchen es una película que no se aparta de lo convencional y eso termina por drenarle mucha fuerza a la historia. Completamente plana a nivel de argumento, sobre el final intenta sorprender con un giro que es más un engaño a la audiencia que un recurso dramático bien empleado.
4/10
