Fue en el festival de Cannes de 2018 que Under the Silver Lake tuvo su premiere. El  presente es apenas el tercer largometraje en la joven carrera del director David Robert Mitchell. Mitchell ganó notoriedad con su anterior It Follows, un filme de terror con una gran estética y un discurso social en su trasfondo. Lo que el director ahora presenta toma un rumbo muy distinto, rompe esquemas y estereotipos y se dirige a la audiencia desde los códigos de géneros muy conocidos de una forma muy poco ortodoxa.

Aniquilando modelos Mitchell logra con Under the Silver Lake un filme muy particular. Se apoya principalmente en el cine detectivesco, que bien supo capturar el film noir, y también en el suspense de los 40 y 50 que Hitchcock engrandeció. La estética la usa a su antojo y no repara en guardar la forma sino más bien en encontrar una voz en una historia que no parece tener principio o final. El drama, el crimen y la comedia se conjugan para mantener al espectador hipnotizado por más de dos horas.

Una Ventana Muy Indiscreta

Cual James Stewart espiando a sus vecinos en la memorable Rear Window (1954), así se nos introduce Sam (Andrew Gardfield). Sus binoculares nos llevan hasta Sarah (Riley Keough) quien ipso facto se convierte en objeto del deseo y en el catalizador de esta historia. Tras la repentina desaparición de Sarah, Sam la emprende como su tocayo en El Halcón Maltés (1941). Sus indagaciones lo sumergen en una serie de bizarros incidentes que vislumbran una conspiración de marca mayor.

Under the Silver Lake se mueve al ritmo de su protagonista y su frenética búsqueda. Casi en tono de parodia Andrew Garfield se nos pinta como un improvisado detective que se obsesiona con una mujer. La estética que el director utiliza nos hace evocar las películas del Hollywood clásico y en esto también influye mucho la dirección de arte. La iluminación, la música y el ritmo de la historia dan vida a una especie de neo noir pero sin la vistosidad estética que caracteriza a estos.

Under The Silver Lake

Andrew Garfield (Google Images)

Sueño o Realidad

La intriga se logra enfrentando al espectador con situaciones que rozan el absurdo. Podemos llegar a pensar que todo lo que le pasa a ese Sam es un largo sueño, o pesadilla. Tiene mérito el director Mitchell por lograr mantener el ritmo y lograr una historia bien balanceada, lo que podemos reclamarle es que todo el momentum que crea se esfuma muy rápido en el acto de cierre.

Un interesante ejercicio resulta Under the Silver Lake. La forma prevalece y da sentido al discurso que plantea el director pero el fondo se hace borroso y nos parece que lo que más importa aquí es lo que se muestra y no lo que se quiere decir. Un viaje psicodélico.

7/10

https://www.youtube.com/watch?v=yQaD63yWGzM