Puntuación: 2.5 de 5.

En el género de la acción a veces sentimos que estamos en una competencia. Título tras título el objetivo es superar al predecesor. Without Remorse (2021) es el filme más reciente en sumarse a esa carrera. Otra super producción protagonizada por Michael B. Jordan que llega de la mano de Stefano Sollima (Sicario 2, ZeroZeroZero). Jordan, uno de los actores del momento y Sollima, un director bien versado en el género. No hacen falta más indicadores para saber que los estudios apuntan a desarrollar otro nicho dentro de una ya bien conocida franquicia.

Esta nueva adaptación de una novela de Tom Clancy se suma a una larga lista de títulos como: La Caza del Octubre Rojo (1990) y Juego de Patriotas (1992). Su personaje de Jack Ryan es uno de los héroes obligados del cine de acción. Ahora le toca el turno a John Kelly otra pieza fundamental en sus novelas, que ya ha sido presentado en otros filmes, pero que ahora lo hace con carácter protagónico. La forma que se le da a la figura de Kelly pretende adaptarse a los estándares de las nuevas estrellas del cine de acción. Su capacidad en el combate cuerpo a cuerpo y su destreza con las armas lo hacen casi invencible.

Sin remordimientos

Originalmente el personaje de John Kelly es un estadounidense de origen irlandés. Willem Dafoe lo encarnó en Peligro Inminente (1994) y también lo hizo Liev Schreiber en La suma de todos los miedos (2002). Ahora en Without Remorse se cambian los antecedentes y tenemos a un Kelly de origen afroamericano. El guión de Taylor Sheridan (Sicario, Wind River) y Will Staples también modifica las circunstancias y motivos del personaje para adaptarlo a la era actual. Una intensa secuencia inicial nos introduce al John Kelly de Michael B. Jordan enseñando todas sus habilidades. La misión se complica y las repercusiones sirven como el principal catalizador para que el guión avance.

La venganza es lo que mueve a este John Kelly y el escenario está dado para que se luzca en una batalla tras otra. Como resucitando una de esas aventuras habituales en el cine de acción de los 80 y los 90, el director Sollima y su equipo se inventan un universo rebosado de clichés que deterioran la historia. Pueden imaginarse al Rambo de Stallone o al Comando de Schwarzenegger, pero con el aspecto del John Wick de Keanu Reeves. El tratamiento del argumento es anacrónico, mientras que la puesta en escena y el proceso estético sí siguen las líneas de lo que propone el guión.

El eslabón más débil

Es en la fotografía de Philippe Rousselot (Big Fish) y en la coordinación técnica de las secuencias de acción que el filme muestra su mejor cara. Tal vez algunos de esos momentos nos inyectan un poco de optimismo, pero la fragilidad de su guión nos devuelve a la realidad. No es suficiente con Michael B. Jordan desbordando la pantalla y acabando con medio mundo para vengar a su difunta esposa. Cuando la historia hace una pausa o alguna transición deja ver sus carencias y en ese momento perdemos la sintonía.

Without Remorse es, hasta ahora, la propuesta más floja de ese universo que representa la obra de Tom Clancy. Si el mundo de John Kelly pretende igualar lo alcanzado por el personaje de Jack Ryan, los ajustes tendrán que ser mayúsculos. No es un problema de forma, pero sí de la propuesta a nivel de argumento e historia. Para sobrevivir en este nuevo ecosistema y con los estándares actuales del género no basta con efectos visuales y elaboradas secuencias de acción.