Puntuación: 2.5 de 5.

La Musiquita por Dentro es la tercera colaboración de la dupla de Ernesto Alemany y Miguel Yarull. Este par trajo al mundo en 2015 “La Gunguna”, una de las mejores obras de la aún incipiente industria cinematográfica dominicana. Para ambos un debut  por todo lo alto, con más que merecida razón. En esta ocasión Alemany y Yarull enfilan las naves por otras aguas y nos llevan al amplio mar de las comedias románticas.

Un amor de película

Nunca voy a olvidar la frase de la película “V for Vendetta” cuando el personaje de Evey (Natalie Portman) le pregunta a V (Hugo Weaving) si la película que están a punto de ver (El Conde de Montecristo) tiene un final feliz. “Como solo el celuloide nos lo puede entregar” responde V. Si bien los días del celuloide palidecen las historias de amor no. El cine se encarga de seguir fabricando las más sublimes historias de amor.

La Musiquita por Dentro maneja los códigos de las comedias románticas hollywoodenses que nos conocemos de cabo a rabo. Hubiera dicho el amigo Armando Almánzar que la formula aquí es la más antigua de todas:

Chico conoce a chica, chico y chica se enamoran. Chicho pierde a la chica, chico recupera a la chica y viven felices para siempre.

Ariel “Guti” (Christian Alvarez) es el muchacho que desde pequeño ha sido un desafortunado en temas de amor y con las chicas en general. Pronto nuestro Guti conocerá a la bella Mar (María del Mar Bonelly) y por supuesto será amor a primera vista. Guti y Mar terminan siendo compañeros de trabajo y Guti comienza su cruzada para conquistar a la doncella. En el camino Guti contará con la ayuda de Raymond La Bujía (Avelino Junior Figueroa “Lápiz Conciente”) quien le dará los trucos para poder alcanzar la meta.

Afiche La Musiquita Por Dentro

La Musiquita por Dentro

La Musiquita

Lo de la musiquita es un adagio muy dominicano, es más; tratar de explicarlo a cualquiera que no haya nacido en la tierra de Duarte sería todo un desafío. Pero la alusión más directa es a ese atrevimiento o picardía que una persona que no lo aparente puede llevar dentro de sí. Es en esa carencia de autenticidad o de identidad quisqueyana donde La Musiquita por Dentro se encuentra con su talón de Aquiles.

Sus personajes cortados al detalle para encajar en los estereotipos de las comedias románticas resultan poco verosímiles, con excepción de Bujía (Lápiz Conciente). Dentro de un grupo de actuaciones que en gran parte de la película se notan forzadas el único que se destaca es el Lápiz en un papel que parece quedarle a la medida.

Es difícil bailar al ritmo de la musiquita pues su guion es demasiado familiar y los clichés no le juegan a favor. Encontramos algunas secuencias que nos mueven y hasta le cogemos el ritmo, pero a seguidas llega otra que nos saca de paso.

Merengue no Rock n Roll

Tengo que volver a la Gunguna pues en ella la dupla de Alemany y Yarull concibieron algo con identidad, algo que era tan de nuestra aldea que tenía la vocación a ser universal. Ahora con La Musiquita por Dentro se deciden por apoyarse en las estructuras pre-fabricadas y se olvidan de aportar frescura a su historia. El sendero que hacemos junto a los protagonistas lo hemos caminado muchas veces.

Le faltó merengue a la musiquita y le sobró rock n roll.